¿Son nocivos para el organismo los tatuajes?

Qué hay de las posibles infecciones?

El tatuaje implica lesiones físicas en la piel que pueden promover la transmisión transdérmica de infecciones virales y bacterianas, dependiendo de las condiciones de higiene durante el tatuaje. Hay tres orígenes potenciales de infecciones después de un tatuaje. En primer lugar, el uso de tinta de tatuaje contaminada. En segundo lugar, la desinfección inadecuada de la zona de la piel a tatuar, por lo que las bacterias residentes en la piel pueden entrar en la piel durante el proceso de tatuar. En tercer lugar, durante el proceso de curación del tejido lesionado después del tatuaje, los pacientes suelen desarrollar prurito y ardor. Esto aumenta el riesgo de sobreinfección de la zona de la piel tatuada debido al rascado y, por tanto, a la inoculación de microorganismos. Pueden producirse infecciones locales superficiales y profundas, infecciones sistémicas, reacciones alérgicas, fotodermatitis, reacciones granulomatosas y reacciones liquenoides. Ocasionalmente se pueden observar enfermedades de la piel localizadas en el área tatuada, como eczema, psoriasis, liquen plano y morfea. Cuando se utiliza como técnica de camuflaje, la falta de coincidencia de colores y la insatisfacción del paciente son complicaciones comunes.

La introducción de sustancias extrañas en la piel durante el tatuaje puede provocar una respuesta tóxica o inmunológica. El momento de estas reacciones de hipersensibilidad de tipo retardado puede variar desde poco después de la aplicación del tatuaje hasta varios años después y puede desencadenarse al volver a tatuarse. En raras ocasiones, pueden ocurrir reacciones generalizadas debido a la autosensibilización que puede explicar por qué las reacciones del tatuaje se vuelven generalizadas. Una reacción de hipersensibilidad localizada estimula el sistema inmunológico causando erupciones cutáneas a distancia. El cuadro clínico es bastante variable e incluye lesiones eccematosas, liquenoides, pseudolinfomatosas, reacciones similares a la urticaria de contacto o reacciones fotoalérgicas a las bajas capacidades de dispersión de la mayoría de los pigmentos. Los mecanismos inmunológicos involucrados son todavía un tema de especulación. Se supone que existe una vía alérgica específica con un patrón dérmico-inmunológico, que probablemente evita los mecanismos existentes en la penetración transepidérmica de los alérgenos. Por lo tanto, se requieren pruebas intracutáneas adicionales, que obviamente incluyen lecturas tardías.

¿Y de las tintas?

Las tintas incluyen hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH), metales pesados y aminas aromáticas primarias (PAA), que se introducen involuntariamente junto con la tinta o se producen dentro de la piel mediante diferentes tipos de procesos, por ejemplo, escisión, metabolismo y fotodescomposición. Estos podrían plantear riesgos toxicológicos para la salud humana, si están presentes más allá de los límites permisibles. HAP como el benzo(a)pireno están presentes en la tinta de negro de humo. Los PAA podrían formarse dentro de la piel como resultado de la escisión reductora de colorantes azoicos orgánicos.Estos ingredientes son altamente cancerígenos. Los metales pesados como el, cadmio, plomo, mercurio, antimonio, berilio y arsénico, son responsables del cáncer, enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares, gastrointestinales, pulmonares, renales, hepáticas, endocrinas y óseas. El mercurio, el sulfato de cobalto, otras sales solubles de cobalto y el negro de humo pertenecen al grupo 2B, lo que significa que pueden causar cáncer en los seres humanos. El cadmio y sus compuestos, por el contrario, pertenecen al grupo 1 (cancerígenos para el ser humano)

Complicaciones de la eliminación de tatuajes

Contrariamente a lo que se piensa, la tinta dentro de la piel no se "borra" sin más. Al experimentar la acción del láser se producen nuevos compuestos químicos con impredecibles efectos,.
Los láseres Q-switched se han convertido en la actualidad en el estándar para la eliminación de tatuajes. Sin embargo, pueden ocurrir complicaciones, con una incidencia de alrededor del 5%. Al aplicar el láser en la piel, la energía absorbida por el pigmento se convierte en calor, lo que constituye el efecto fototérmico. Hay una rotura de enlaces químicos dentro del pigmento, que es el efecto fotoquímico. Se produce una destrucción mecánica de los pigmentos debido a efectos fotoacústicos.

A continuación, se eliminan de la piel pequeñas partículas de pigmento, productos de descomposición desconocidos y compuestos químicos recién generados a través de los vasos sanguíneos o el sistema linfático. Los pigmentos que quedan en la piel pueden exhibir características químicas diferentes en comparación con los pigmentos no irradiados, lo que nuevamente estimula una reacción del sistema inmunológico. En teoría, algunos pigmentos de tatuajes que contienen metales podrían descomponerse en sustancias químicas tóxicas en el cuerpo cuando se exponen a la luz. Esto aún no se ha informado in vivo, pero se ha demostrado en pruebas de laboratorio. También se ha demostrado que las aminas cancerígenas se generan mediante la escisión de colorantes azoicos inducida por láser. Las complicaciones de la eliminación de tatuajes con láser se pueden dividir en inmediatas y retardadas.

Las complicaciones agudas incluyen dolor, formación de ampollas, formación de costras y hemorragia puntual. Entre las complicaciones tardías se pueden observar cambios pigmentarios, hipopigmentación e hiperpigmentación, oscurecimiento paradójico de los tatuajes cosméticos y reacciones alérgicas. Otra complicación común es la presencia de pigmentación residual o imágenes fantasma. Las cicatrices y los cambios de textura son posibles complicaciones irreversibles. Además, la eliminación de tatuajes puede ser un procedimiento tedioso y prolongado, especialmente en el caso de los tatuajes profesionales, que son difíciles de borrar en comparación con los tatuajes de aficionados. De ahí que el dicho de "Think before you ink (piensa antes de tatuarte) " es muy cierto en el escenario actual.

Los pigmentos clásicos y sus productos de degradación utilizados en el tatuaje, como los pigmentos a base de dicromato (verde), cobalto (azul), cadmio (amarillo) y sal de mercurio (rojo), son responsables de este tipo de reacciones en los tatuajes permanentes. Además, la contaminación de pigmentos con sulfato de níquel puede provocar reacciones alérgicas marcadas. Otras posibles fuentes de alérgenos son los ingredientes orgánicos de los pigmentos para tatuajes, como los colorantes azoicos y el quinacridón.